miércoles, octubre 18, 2006

Confesión Décimo Segunda (odio los números ordinales... mejor pondré sólo "número algo")

Y dijo Isis que no esperaba tanta producción (¡te quiero, la Paky! ¡Vamos al koto!... hahahaha). Aquí vengo nuevamente quejándome de mi vida laboral.

Para los que no sepan, yo, Id, trabajo en un Call Center. Y hace poco más de 2 meses obtuve un ascenso. Si señor, no más llamadas de clientes quejosos, no más "Es que no entiendo mi factura", "Es que tiene 2 días buscando el satélite y no lo ha encontrado" y, mejor aún, no más "Quiero cancelar mi programa porque no tengo Playboy en Español".

Yikes. El día que me avisaron fui tan feliz que me fui al Carlos 'n' Charlie's a festejar con Martinis de Chocolate (¡qué cosa tan más deliciosa!) y pollo a la algo. Ese mismo sábado, me di cuenta de que me habían dado un equipo preformado. Mi sorpresa fue cuando supe que, era un equipo que en realidad tenía malas referencias. Pero muy malas. Ya sea por ellos, o por su anterior supervisor, era un equipo con números bastante deficientes. Pero bueno. Inocente yo, creí que era yo tan chida como para manejarlos y sacarlos adelante. Y así fue, durante el primer mes.

No todo iba miel sobre hojuelas, obviamente, pero las cosas comenzaron a ponerse difíciles cuando me mandaron más gente, gente nueva, nuevecita y de paquete recién llegada de entrenamiento. "No hay bronca", me dije yo, y comencé a trabajar con ellos. Y... ¡BAM!, que mis números comienzan a irse hacia abajo... "No hay bronca", me dije, otra vez. Y poquito a poco, comenzaron a subir sus números. Luego, un reverendo despipoingue (hahahaha), hizo que me movieran todo mi equipo y me mandaran gente nueva. Aunque no tan nueva como la que ya tenía, estos ya tenían sus mañas.

Y son esas mañas, precisamente, las que me hacen tener el equipo con peor desempeño de toda la empresa. Ouch. Entre ausentismo, calidad, créditos y adherencia al horario, estamos pero que si bien mal. Y lo feo es que a mi me miden por el desempeño de mi grupo. Y mi grupo, para ser sincera... apesta.

Pero no todos son tan yuckies... la gente nueva está trabajando bien, ya que agarraron camino... pero por esos dos ca...... hijos de su re.... madre, mis números están mal. Y a veces me siento tan impotente que quiero llorar... y me siento tan decepcionada de mi misma que quiero tirar todo a la fregada y buscar otro trabajo, aunque luché tanto porque me dieran ese ascenso. Porque vaya que lo hice... no falté ni una sola vez, rara vez llegué tarde, mantenía mis números en muy buen nivel a pesar de la estupidez de la gente ("Es que esto es un ladronismo", según un cliente de Delgadillo). Y ahora, porque otra gente no quiere trabajar... yo la llevo. Y se siente bien pinche pinche (como diría Cesi, una de mis agentes).

A eso súmenle mi atribulada vida familiar y... estoy fregadísima. Lo sé.

¿Palabras de aliento, alguien? Necesito un: "Es que eres bien chida, Id", o algo por el estilo o voy a llorar... T-T

Atentamente, una muy decepcionada Id

sábado, octubre 14, 2006

Confesión Intermedia (está muy bueno esto!)


Pongo aquí una foto que editó mi amiga Isis... según ella, eso seré yo en muy poco tiempo (soy la de café, por cierto)